Para todo paciente de cáncer, encontrar alternativas que contribuyan a sobrellevar su condición con la mayor calidad de vida posible se convierte en una meta especial. Con esta realidad en mente fue que Mayra Rodríguez Giovannelli creó el sistema que se conoce como CancerKi.
El también programa piloto, que inició en 2003 junto con la oncóloga Mayra Rivera Figueroa en el hospital Alejandro Otero López de Manatí, tiene como misión asistir a este tipo de paciente, no importa el estado avanzado de su enfermedad.
Armonía necesaria
Según Rodríguez Giovannelli, el sistema consiste en el manejo de energía utilizando las técnicas del reiki. Esta práctica de origen japonés busca lograr la sanación o equilibrio a través de la imposición de las manos con el fin de canalizar la energía universal. Por lo general, estas sesiones se dan simultáneamente con las terapias para el cáncer de la medicina convencional (como la quimioterapia).
“Se parte de la premisa de que el cáncer es también una energía”, señala la experta en medicina energética, quien tiene dos doctorados honorarios conferidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con sede en Argentina, por sus aportaciones a la medicina alternativa y complementaria en el tratamiento del cáncer. “Durante años, fui recogiendo información sobre cómo va reaccionando esa energía (cáncer), cómo se va comportando”.
Eso le permitió crear el sistema CancerKi, que entre sus propósitos tiene lograr la armonización de la energía en el cuerpo, incluyendo en aquéllos con este mal de salud. Como parte de las metas, se incluye “ayudar a mitigar los efectos secundarios que suelen tener los pacientes después de terapias tan fuertes como la quimioterapia y la radioterapia”. Entre éstos se encuentran mareos, vómitos, debilidad y la dependencia a medicamentos para el dolor.
“Cuando nuestro cuerpo está fuera de balance, está en un estado donde nos sentimos agobiados, donde nos sentimos perdidos. Esto, eventualmente, va a afectando el cuerpo físico”, explica la sanadora. “Este concepto no es nuevo. La medicina oriental lo ha planteado por siglos”, añade.
De interés para varios expertos
Como parte del programa piloto CancerKi, durante estos años se ha recopilado data destinada a la investigación de esta técnica y su eficacia en la terapia contra el cáncer. “Hace poco me hicieron una invitación para ir la Universidad de Beijing (China), al recinto de ciencias médicas, para que presente en un congreso de qué se trata este proyecto que hemos creado aquí”, resalta con entusiasmo.
El programa piloto “ha servido de ejemplo porque la información que recolectamos aquí, en términos de manejo de energía contra el cáncer, no existe en ningún otro lugar del mundo”, asegura la experta en reiki. “Por eso muchas personas de diferentes países del mundo empezaron a contactarnos para que compartiéramos la información que hemos recopilado”.
Por otro lado, Rodríguez Giovannelli alerta sobre algunas personas que aseguran ser expertas en reiki y haber participado del proyecto, ofreciendo a pacientes de cáncer una terapia similar. Al respecto, advierte que “en Puerto Rico sólo la doctora y yo somos las únicas autorizadas para dar terapias basándonos en este proyecto”.
Más que medicina convencional
Por su parte, la Dra. Mayra Rivera Figueroa, quien por más de 15 años se ha dedicado a la oncología, se motivó a formar parte de este proyecto “porque siempre he tenido claro que el problema de un paciente de cáncer no es solamente algo físico”. De hecho, “cuando la OMS define lo que es salud, te dice que es una integración del cuerpo, alma y espíritu, y así está definido científicamente”.
En el caso de estos pacientes, “he notado que cuando les dices que tienen esta enfermedad, el 100 por ciento de ellos lo primero que piensa es que se va a morir”, analiza. “En la actualidad, ya se sabe que además de los tratamientos de la medicina convencional, también la actitud es clave en la sanación o en la mejoría de una enfermedad”, añade convencida. Por eso, al enterarse del interés de la experta en medicina energética por poner en práctica las técnicas del reiki en estos pacientes, la contactó para iniciar el proyecto que aún sigue vigente al día de hoy. Además, motivada por esta alternativa, visitó varios centros en Estados Unidos donde la medicina tradicional integra otras opciones de la medicina alternativa, tales como meditaciones, yoga, visualizaciones creativas y otras.
“Me di cuenta de lo necesario que es ayudarlos a contar con calidad de vida, a sobrellevar esta enfermedad con mayor optimismo, que entiendan que hoy día muchos de estos pacientes sanan, no tienen que morir de la enfermedad”. A su vez, aclara que no importa cuán avanzado sea el estado de la enfermedad, “nunca es tarde para someterse a estas terapias”.
De otra parte, aclara que de ningún modo el programa CancerKi fomenta sustituir el tratamiento convencional con las terapias alternativas. La también hematóloga señala que “soy científica y como oncóloga creo en la quimioterapia y la radioterapia como parte del tratamiento”. El reiki es “una herramienta más para ayudarte con todos los efectos que producen los tratamientos y la enfermedad en sí”, que incluyen “baja autoestima y depresión”.
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